Realiza al menos cinco comidas al día: tres principales (desayuno, comida y cena) y dos colaciones (a media mañana y a media tarde).
No te saltes ninguna comida, ¡todas son importantes!
Usa platos pequeños y sírvete porciones reducidas.
Cuando vayas al supermercado, haz antes una lista de los alimentos que requieres y no recorras todos los pasillos.
No compres si tienes hambre, de lo contrario, todo se te antojará y comprarás cosas de más.
Evita consumir alimentos frente a la televisión o la computadora, porque generalmente no te das cuenta cuánto consumes.
Disfruta tus alimentos, come despacio y tranquila. Deja de comer antes de sentirte demasiada llena; recuerda que la sensación de saciedad tarda en llegar aproximadamente 20 minutos.
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